Friday, December 28, 2012

Haití y sus escombros.

El siguiente es un texto algo viejo, rescatado mas no pulido, de cuando Haití sufrió la furia de la tierra.

 Oh Haití...¿Dónde están tus hermanos?

 ¿Donde están?
Oh, Haití. ¿Dónde están tus hermanos?
¿Dónde las almas gemelas que sufren tu dolor?
Mira al cielo, están cayendo.
Mira al mar, vienen nadando.
Mira a la tierra, su camino es difícil y avanzan entre escombros.

Pero tus hermanos y su ayuda no bastan.
La comida y el agua no bastan.
Las medicinas y el cuidado no bastan.
No llegan tan profundo como para paliar tu dolor aberrante.
No llegan tan hondo como para curar tu ilusión moribunda.
No llegan a tiempo para rescatar tu identidad enterrada hace mucho.

¿Dónde está, entonces, tu esperanza?.
Cava. Quita los escombros.
Cava. Llora tus muertos.
Cava. Limpia tus raíces anquilosadas.
Cava. Libera tu carne autóctona.
Cava. Pule tus huesos blancos, fuertes.
Cava. Has sangrar tu alma espesa.
Cava. Llega hasta el centro de tu ser.
Cava hasta encontrar el valor de tus antiguos,
la fuerza de tus viejos,
la sabiduría de milenios,
La perseverancia que los haga renacer,
Superar el terrible dolor del parto
Y ver la nueva luz,
la del futuro que comienza,
Construido con tus manos
Con tu sangre.
Que se ha destruido tu hogar, tus calles.
Pero no se ha destruido Haití.

Antología Fin del Mundo: Fragmento de Infierno

El Fin del Mundo no fue. Aun así, los cuentos de la antología mencionada en el título continúan siendo irresistibles. Para muchos que aún no la han adquirido, les dejo un fragmento de mi cuento, Infierno, parte (introducción) de la colección "Crónicas de los tumores-demonio"
El libro aún puede conseguirse en Librería Universitaria, en la UCR
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Infierno

¿Sabes, espectro? Nunca me imaginé que así fuera el fin del mundo. Mirá por la ventana: hace poco estaba como a veinte metros; ahora está como a diez, esa lava. No sé si es lava, porque no se ve como en el tele. Es como que el suelo se derritiera, se fundiera y convirtiera en esa cosa roja incandescente. Y no es que avance, ¿sabes?; si lo ves bien, no es como un río que avanza, sino que la tierra normal se comienza a calentar y se pone al rojo vivo. Poco a poco.
 

Esos gemidos tuyos no parecen lastimeros, sonás como si más bien quisieras hablarme con la boca llena. Dejá de gemir y mirá por la ventana, si es que estás en algún lado con ventanas. Mirá el cielo, negro, sin estrellas ni luna. Para mí que está cubierto por una capa de cenizas y humo que tapa todo. Si mi reloj no está mal, de hecho serían como las tres de la tarde. Y todo está oscuro. Pero yo no oí ninguna explosión ni tampoco un temblor ni nada que dijéramos fuese un volcán o algo. Simplemente me desperté y la casa estaba vacía. Eso es lo que me extraña, Lisa no me hubiera dejado sólo. Y como ya no están las casas de los vecinos, no puedo preguntar. No hay nadie, espectro; solo vos y tus gemidos. Simplemente no lo entiendo.
 

La verdad, siempre supuse que el mundo se acabaría con una gran explosión, algún meteorito, o incluso alguna epidemia o guerra mundial. Pero que el suelo se derrita y el cielo se apague sí que es inesperado. También, si lo pienso, es increíble que no haya nada más que esta casa y yo aquí solo. Bueno, con unos gemidos que no sé de dónde vienen; pero en fin, nadie que parezca humano. Lo siento, espectro, pero también, por alguna razón, no me encuentro desesperado ni con miedo. Imagínate una casa sin luz, cercada por lava, andando uno con una vela, con un espectro quejándose… cualquiera estaría muerto de miedo. Oye, espera…
 

¡Sí! El núcleo de la Tierra se sobrecalentó y el calor está subiendo a la superficie derritiendo todo. Eso lo explicaría, aunque creo que el mar evaporado ya nos habría cocinado al vapor, ¿no crees?
La verdad, te hablo para no enloquecer, creo yo. La verdad es que Lisa es lo que más me preocupa. ¿Será que salió a buscar ayuda y quedó atrapada en la lava? ¿Será que las casas de los vecinos ya están calcinadas y este es el único lugar de la Tierra sin hervir? Si fuera así, si fuera el último lugar de la Tierra, quisiera tener a Lisa conmigo. Suena romántico, ¿verdad? Pero es realmente es triste. Amor hasta la muerte, pero eso no es cierto. Debo suponer que Lisa murió; pero el amor no se acaba, solo duele. Y moriré yo, pero el amor persistirá. Porque la amo… ¿Oiste? ¡Shhh!… … … creo que hay alguien en la casa… ¡Sí, son pasos!
...

Saturday, December 22, 2012

La Aurora y el Llanto de las Codornices

Esta oscuro, todavía… ¡Dios, qué noche tan larga! Aún oigo el fuego. Pero no se oye como llamaradas. Se oye como… un fuego… de hojas, sí, como cuando se queman hojas, con pequeños estallidos aquí y allá. Como cuando el fuego va muriendo… muriendo… Sí, tío Raúl debe estar muerto. El fuego debe haberlo matado… o el humo, dicen que el humo mata antes que el fuego. Que lo ahoga a uno. ¡Qué feo debe ser morir ahogado! Pero tal vez murió antes por la herida. Sí, un corte en la femoral lo mata a uno en minutos. Imagino que la gente no sabe que un corte ahí los mataría. Es bueno aprender anatomía… ¡mi tarea!... no, me duele mucho todo para levantarme… aun es de noche, si llego a la casa me caería en la cama y me despierto hasta el mediodía… ni siquiera llegaría a clase… perder el curso de anatomía por esto… ¿y si le cuento a la profe? Tal vez me deje llevar la tarea luego… y contarle a papá… ¡Dios! Contarle a papá que maté al tío Raúl… ¿Se enojará? Le puedo decir que no fue culpa mía… pero sí lo fue, ¡qué idiota que soy!, pero una con rabia no piensa, eso le puedo decir, que no pensaba, que quería solo cortar esa cochinada y se me fue el cuchillo por accidente… el cuchillo, ¡sí!... ese cuchillo es la prueba, mi prueba, el tío Raúl me iba a matar, es lógico, luego de hacerme lo que me hizo y golpearme así, alguien me hubiera preguntado… ¿y si solo me amenazaba para que no dijera nada de lo que me hizo?... lo que me hizo… no, mejor no acordarme de ese olor animal, su baba, su rostro… maldito tío, y ¡yo que lo quería tanto!, yo que lo prefería de niña porque era el gracioso que nos traía juguetes, nosotras sus sobrinas favoritas… no, ¡no!... mi hermanita… no te preocupes Ani, él no te va a hacer nada, ya no está, lo maté, a ese maldito… ¿Sabes, Ani? Me siento muerta, esa estúpida de Carolina dice que las mujeres se dejan… no pude Ani, no pude…no pude… es que, es que… lo golpeé, ¡lo hice! Lo golpeé y nada, tenía mucha fuerza, me golpeó en las costillas, las piernas, los brazos, me duele el pecho cuando respiro…  y el cuchillo… si, tío Raúl me metió el cuchillo en la panza… pero no se si antes, o después… ¡sí!... la herida de mi estómago… prueba que tío quería matarme… ¿Qué le diría mi tío a papá cuando preguntara por mi? Seguro que me escapé con Carlos… Carlos… ¡no viniste! Cabrón inútil, no viniste… no viniste… tengo veinte años y aún creo que mi héroe vendrá y abrirá la puerta de golpe en el último instante… pero no viniste…no… la puerta… ¿quién era en la puerta?... ¡ya recuerdo, las codornices!... por eso mi tío no me mató, había alguien en la puerta, un ruido, picoteos… eran las codornices dijo… pero las codornices no salen de noche… Carlos, la codorniz es más valiente que tú, a ti que te encantan los huevos de codorniz… te comes lo hijos de la codorniz… los humanos comemos lo hijos de otros, somos bestias, no, monstruos repugnantes… mi tío el monstruo que se come a los hijos de su hermano… y los mata… matar a una persona, ¡tan fácil en la tele!, tan fácil… tener una persona al frente y ¿matarla? No, no podría… ¡pero maté al tío Raúl!... pero fue un accidente, ¿verdad?, codornices, ustedes lo vieron, no quería matarlo, solo quería castigarlo por lo que hizo, cortarle su cochinada, que ya no fuera hombre, que ya no pudiera hacer lo mismo con otras… ¡sí!, no podrán culparme, lo hice en defensa de otras ¿verdad? Soy inocente, sí… pero, no… lo golpeé muy fuerte en la cabeza, cuando fue a ver la puerta… la puerta… estaba abierta… me pude haber escapado, tío Rául estaba inconsciente… pero no lo hice, busqué el cuchillo y un palo encendido, de la chimenea, para cortar y cauterizar… cortar y cauterizar… pero estaba débil, golpeada, y ¡furiosa! ¡Maldito tío Raúl!... y clavé el cuchillo, con toda mi furia, mi cólera, mi odio, ¡Maldito tío Raúl!… pero le di a la pierna… ¡Dios, qué montón de sangre!... quede empapada, me asusté, me asusté, y salía y salía más… y tiré el palo encendido… el fuego… ¡el fuego también fue culpa mía!... quemé la cabaña de papá, papá… debiste estar ahí… dijiste que estarías… no, fue tío Raúl el que dijo que estarías… soy una idiota, creer en esa mentira… pero ¿por qué no creerle?... era mi tío favorito, no pueden culparme de eso… pero lo maté… su esposa me culpará, sí, dirá que fui yo quien lo sedujo, ¡que asco!… si mi tío tuviera hijos también me culparían, que maté a su papá… ¡hijos! ¡Dios! ¿Y si quedo embarazada?... ¡no, no, NO!, cómo le digo a su hijo que maté a su papá, cómo, cómo lo miro, cómo le cuento… su papá, pero yo seré… ¡su mamá!, ¡Pero ni siquiera se cómo ser una madre! .... yo de mamá, ¿ahora qué hago?... si pudiera preguntar a mami... ¡Oh, mami, me haces falta, me haces tanta falta… ¿Donde estás? ¿no hay un cielo? ¿me ves desde allá?... mami, debes estar sufriendo… mami… verme aquí tirada boca abajo en el zacate, llena de sangre, pero no te preocupes, no es mía… es de tío Raúl… que maté, mami, lo maté sin querer, porque me hizo cosas horribles mami, ¿lo viste?, pero me salvaron las codornices, que no salen de noche… es de noche y aun no llego a casa… papi y Ani deben estar preocupados… debo levantarme, pero no puedo… no me quiero mover… aún no se seca la sangre del tío… ¿será del tío?... podría ser mía... no se. Siento el zacate mojado, pero no puedo ver, esta muy oscuro, ya no alumbra tanto el fuego… pero amanece… la bella aurora… si, amiga codorniz, la aurora es la de los nuevos días, mañana, hoy, se resolverá todo… pronto vendrá papá y me llevará a dormir en mi camita… y despertaré a desayunar y todo será un suelo horrible… ¿hace rato estás conmigo? No me había dado cuenta… tampoco sabía que las codornices hablaran… ustedes se ven tan bellas en la luz, y la mañana tan bella y fresca… oh, sí, veo el charco… ¿es mi sangre dices?... oh, debo estar mal entonces, débil, por eso no me levanto… tengo sueño codorniz, quiero dormir un poco mientras llega papá, tal vez venga Carlos también… ¿Qué, qué cosa pura?... ¿Qué me preguntarán si soy pura?...  No sé, codorniz, no me siento… No sé… qué dirá Carlos, papá… yo, la asesina, tirada en el zacate, nadando en la sangre de mi tío… ¿Qué? ¿Qué no me culpe? Casi no te oigo, codorniz… Entiendo, mi pureza está intacta… si, ninguna bestia puede arrebatar la pureza… yo soy la víctima, nada hice para merecer nada de eso… y sí, tío hizo todo para merecer lo que le pasó… ¿Qué si lo perdono?... no se… puede ser… ¿Qué? ¡NO TE OIGO! ¿Nos vamos? ¿Adonde?... te ves triste… y como con esperanza… sonríes… es una sonrisa triste, codorniz, me calma mucho mirarte… esta aurora es muy brillante, ¿sabes?... pronto vendrá papá y me llevará…mi papá, me levantará con sus brazos, como siempre... me pondrá en mi cuna, me arrullará y me contará un cuento con princesas mientras mami me prepara leche caliente… tengo sueño... buenas noches, papi, mami… si, codorniz, ya voy, déjame cerrar lo ojos un poco nada más… siento agua en la cabeza… ¿que es, sangre?... no, lluvia debe ser… tampoco, ya siento, ya sé que es… son lágrimas…sí, lágrimas… de codorniz….
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De la colección Cuentos Extraños.
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